PEDAGOGÍA DISCIPLINA EN EXTINCIÓN
Atinos y desatinos de un estatuto.
De la ilegitimidad.
El progreso científico se ve obligado a construir teorías que permitan dr mejor cuenta de los hechos y explicar mejor la realidad; que posibiliten con mayor rango de precisión las predicciones y no le tema a las contradicciones emergentes en ese devenir de especulaciones.
De la impostura intelectual.
Encontrando la cientificidad en un estatuto al que es inexcusable no acceder, se busca hacerlo a como dé lugar, para no quedarse en la saga de los tiempos de la sociedad moderna.
Hay pedagogos que con mayor conciencia de la necesidad, y mas honestos en el reconocimiento de las limitaciones del saber pedagógico, han comenzado a construir verdades por donde adentrarse en el campo epistemológico e incorporarlo como compañero de viaje necesario en la empresa cientifizadora de la pedagogía. La pedagogía como campo de la educación y del conocimiento, ha lanzado una llamada de auxilio que no ha sido debida y responsablemente atendida por parte de los propios pedagogos, lo que ha resultado a los ojos de otras disciplinas científicas, un inevitable descredito del mismo y lo ha situado en un inminente peligro de extinción frente a novedades y llamativas imposturas intelectuales.
BIBLIOGRAFÍA
8a. Juárez Hernández, Fernando. (2007). Pedagogía: ¿Disciplina en extinción? Atinos y desatinos de un estatuto. México, POMARES-UPN (189-197).
LA EDUCACIÓN O LA UTOPÍA NECESARIA
La educación debe estar al servicio de un desarrollo humano más armonioso, más genuino, para hacer retroceder la pobreza, la exclusión, las incomprensiones, las opresiones, las guerras etc. A pesar del arduo trabajo por avances científicos siempre un sentimiento de desencanto parece dominar y contrasta con las esperanzas nacidas.
Principales tensiones del XXI: La tensión entre lo mundial y lo local, entre lo universal y lo singular, entre tradición y modernidad, entre el largo plazo y el corto plazo, entre la indispensable competencia y la preocupación, entre el extraordinario desarrollo de los conocimientos y las capacidades de asimilación del ser humano y finalmente entre lo espiritual y lo material.
La educación durante toda la vida se presenta como una de las llaves de acceso al siglo XXI.
LOS CUATRO PILARES DE LA EDUCACIÓN
Los pilares de la educación son: Aprender a conocer, aprender a hacer, aprende a ser y aprender a convivir, en seguida se menciona lo más importante de cada uno.
1. Aprender a conocer: Tiene menos a la adquisición de conocimientos clasificados y codificados que al domino de los instrumentos mismos del saber, puede considerarse a la vez medio y finalidad de la vida humana. En cuanto medio, consiste en aprender a comprender el mundo que le rodea.
2. Aprender a hacer: Ésta está estrechamente vinculada con la formación profesional.
3. Aprender a vivir juntos, aprender a vivir con los demás: Este aprendizaje constituye una de las principales empresas de la educación contemporánea. La idea de enseñar la no violencia en la escuela es plausible, aunque solo sea un instrumento entre varios para combatir los prejuicios que llevan al enfrentamiento.
4. Aprende a ser: La educación debe contribuir al desarrollo global de cada persona: cuerpo y mente, inteligencia, sensibilidad, sentido estético, responsabilidad individual y espiritualidad. Todos los seres humanos deben estar en condiciones, de dotarse de un pensamiento autónomo y crítico y de elaborar un juicio propio, para determinar pos sí mismos qué deben hacer en las diferentes circunstancias de la vida.
BIBLIOGRAFÍA
Delors, Jaques (1997) La educación encierra un tesoro, UNESCO. México. (9-26) y los cuatro pilares de la educación (91-102)
PEDAGOGÍA 3000
Guía práctica para docentes, padres y uno mismo
En la actualidad evidentemente se está atravesando por una nueva civilización, especialmente en el ámbito educativo pues según Paymal “significa que nacen niños con perfiles psico-emocionales ya modificados y pautas de aprendizaje diferentes, los cuales requieren de nuevos paradigmas, de un nuevo lenguaje, de una nueva ética, de una nueva pedagogía basada en el amor incondicional” (p. 87)
Evidentemente, se observa que la educación ha sufrido cambios, el principal de ellos es que el docente primeramente requiere de una verdadera vocación por ser docente, pues ahora el maestrante aparte de ser guía para la concepción de un nuevo conocimiento, también será necesario darles amor a los aprendices, pues el hecho de que los niños se sientan en confianza y en contacto con la naturaleza que los rodea, lograran ser competentes para la vida.
Para que los estudiantes aprendan a ser competentes, se necesita de una educación más activa, en la que se les ofrezcan actividades en la que ellos estén en constante movimiento, como lo son el juego, etc. La misión de la nueva escuela debe abarcar la construcción de valores, éticos, cívicos y morales, de habilidades, destrezas, pericias y actitudes. La escuela debe brindar y ofrecer una educación integral. La educación debe de ser más flexible, estudiar ramas de tu interés, y el profesor te ayudara a descubrirlas.
No existe una receta mágica que señale exactamente cómo actuar para educar a los niños y jóvenes de esta Era. Todos los seres humanos estamos en el proceso de evolución consciente o inconscientemente, todos sentimos el cambio de una o de otra forma y, lo más importante, cada uno de nosotros es un Ser Único e irrepetible; por lo tanto, respetar nuestra esencia y la de los demás es básico. Según Paymal “no se ve bien sino con el corazón; lo esencial es invisible para los ojos” (p.102)
Por lo que, ahora según el autor se requiere dar prioridad a enseñar a los alumnos a ser seguros de sí mismos mediante las estrategias como la meditación, la oración, entre otras.
Entonces, facilitar y amar son las nuevas funciones de los profesores. Los niños, niñas y jóvenes de hoy y mañana son la respuesta de amor y conciencia que necesita la Tierra. Muchos de ellos traen innatamente los nuevos códigos de la nueva humanidad y los dones del despertar. Formarán la nueva sociedad.
BIBLIOGRAFÍA:
Paymal, Noemí. Pedagogía 3000. Guía práctica para docentes, padres y uno mismo. Cuarta Edición. Editorial Milenio. Bolivia Pág. 87-102.